Buscar este blog

domingo, 23 de agosto de 2009

Maldito amarillo

Los Delicados se han terminado por completo, el humo que desprendo no tiene valor. ¿Cuántos cigarros se han terminado al mismo tiempo? El mundo me parece pequeño e insolente. Me llamo Saúl, me parezco a mi padre, soy el último rostro de una cadena estúpida.

Me perturba escuchar que la gente se acerque y me diga que han encontrado alguien parecido a mí:

-¡te vi caminando el otro día!

-No era yo

- pero si eras igualito, ¿por qué no me hablaste?

Si pudiera responder con franqueza habría dicho que ninguno de mis otros responde al saludo de mis desconocidos, que a su vez vienen a mí para solucionar lo que no me importa.

Es terrible parecerme al mundo, pensar que un maldito amarillo acaba de terminarse los cigarros, creer que otro jodido caucásico es confundido con un bolillo.

Ya no hay gatos en mi casa, no sé qué hacer mientras decenas de miradas ocasionales me embisten, no quiero preguntarme sobre nada, ni pensar en nadie.

1 comentario:

harukoMoe dijo...

Eduardo Salud! TQM!!!